No es un título apocalíptico. No es que vaya a desaparecer o destruirse. Pero..., puede que este paseo por las cañadas de los pinsapares rondeños sea el último que disfrutemos por este espacio natural, ya que pronto cambiará a la máxima figura de protección: de Parque Natural a Parque Nacional. No es un tema que nos entusiasme. Ya hemos opinado en algún foro que preferimos que la Sierra de las Nieves siga siendo Parque Natural -de momento esta protección le va bastante bien- y en todo caso que se amplíe su ámbito geográfico hasta los pinsapos de Sierra Bermeja. Mientras tanto puede que esta jornada, en un fresco día de los primeros de este verano, subiendo y bajando entre pinsapos, sea nuestra última excursión por el Parque Natural Sierra de las Nieves. Cuando volvamos, ya en otoño o invierno, puede que algo -o todo- haya cambiado.
"Forman el segundo nudo de la cadena de montañas de la provincia las sierras de Junquera, de Tolox, Blanquillo y de las Nieves: esta última mide de 5,500 á 6,100 piés sobre el nivel del mar, y se hallan entre sus ondulaciones las puntas del Caucon, del Oso, del Peñon de la Alcazaba, de la Torrecilla, de los Valientes, de los Enamorados, del Pilar y de las Plazoletas, alternadas con los tajos de la Caina, del Picacho y de Fatalandá, y con las gargantas del Haza y del Tajo, impracticables para el hombre".
José Bisso y Vidal (1830-1893), escritor malagueño.
En verano se cierra el acceso para vehículos a la zona recreativa de Quejigales. Hay que andar 2,5 kilómetros de más por la pista. Por suerte el día es espléndido y corre una brisa fresca. No parece verano, salvo por la intensa luz mañanera. Voy con mi amigo Faustino, teníamos pendiente un pateo por este lugar y allí que nos fuimos.
Ya por esta pista de acceso vamos viendo plantas de floración tardía (si tenemos en cuenta que la primavera es la estación de máx. floración), típicas de media-alta montaña. Esta Jurinea pinnata suele crecer sobre dolomías y entre los 700 y 1.800 metros de altitud. Caminanos a 1.300.
Inula montana. Una especie de espectaculares flores amarillas que es común en la mitad norte peninsular. En Andalucía solo en zonas de media-alta montaña.
Phlomis crinita subsp. malacitana. Un matagallos malagueño con poblaciones sueltas en Cádiz, Granada y Almería.
Scorzonera hispanica.
Lonicera etrusca.
Pasamos Quejigales y seguimos faldeando en busca de la última cañada de esta vertiente.
Al fondo la pelada Sierra Hidalga (la Peineta, su cumbre, sombreada por nubes) y los torcalillos que la circundan. Algunos con nombres tan sugerentes como el Carramolo del Queso, una traducción muy local y acertada de lo que sería un karst.
Un esqueleto de pinsapo destaca entre ejemplares jóvenes (posiblemente sean sus nietos o incluso choznos). El pico más alto que vemos ahora (fondo der.) es el Viento (mapas viejos) o Blanquilla (mapas modernos) con 1.429m.
La sombría Cañada de las Ánimas nos acoje para tomar altura poco a poco. Dos viejos pinsapos "enamorados" se abrazan junto al sendero.
Al fondo la cumbre, con forma de muela, del Peñón de los Enamorados.
Bajo los pinsapos destacan estas bellas orquídeas; las penúltimas de la temporada en florecer por aquí: Cephalanthera rubra.
Algunas aprovechan un mínimo rayo de sol. Una araña cangrejo (Thomisus onustus), espera que alguna presa pase por allí.
El Peñón de Ronda, que pese a su nombre solo tiene un tercio de rondeño, ya que reparte su roquedo con Yunquera y El Burgo. En la cumbre coinciden los tres términos.
Ononis reuteri. Una leguminosa recogida en la Lista Roja de la Flora Vascular de Andalucía con la categoría de Vulnerable. Crece en claros de los pinspares y encinares de Ronda y Grazalema.
Junto a la C. rubra aguantan algunos ejemplares frescos de esta "orquídea de las cintas": Himantoglossum hircinum.
Otra Cephalanthera rubra que fotografiamos por su peculiar ubicación, entre trozos de madera de pinsapo.
Ultimas revueltas y vamos saliendo de la Cañada.
Un pinsapo y su retoño.
En esta zona los vientos pegan fuerte y los ejemplares de enebro y sabina son rastreros pero extensos. Algunos tapizan muchos metros de suelo rocos. En la imagen coinciden una sabina a la izq. -de un tono verde más intenso- y un enebro a la der. -de un verde más claro-.
Una sabina rastrera de gran tamaño (puede que coincidan varios ejemplares) y los restos de un árbol en el centro del tapiz verde.
Nos dirigimos al Pozo de Nieve.
Otra flor de altura. Erodium cheilanthifolium. Endemismo de sierras andaluzas que crece sobre roquedos calizos a partir de 1.300 m. de altitud. Considerada rara por los botánicos.
Al fondo (hacia el oeste) nuestra querida Sierra de Grazalema.
Orobanche haenseleri un jopo parásito exclusivo de la hierba de los ballesteros o eléboro fétido (Helleborus foetidus), también conocida como "marihuana de los tontos".
Orobanche haenseleri (detalle).
El pozo de la nieve. Estamos en t.m. de Tolox.
Petrorhagia nanteuilii.
En esta enorme nava o meseta a 1.700 m. de altitud que se conoce como Puerto de los Pilones la estrella botánica es el quejigo de montaña. Quercus alpestris para algunos botánicos, o una subespecie o morfotipo de Quercus faginea adaptada a la altitud, para otros.
Quercus alpestris no forma un bosque en este paraje, más bien una dehesa donde se mezclan ejemplares muy viejos con jóvenes, muchos de ellos provenientes de repoblación.
Grupo de quejigos posiblemente del mismo pie.
Quercus alpestris no forma un bosque en este paraje, más bien una dehesa donde se mezclan ejemplares muy viejos con jóvenes, muchos de ellos provenientes de repoblación.
Grupo de quejigos posiblemente del mismo pie.
Agalla seca de Andricus sp. en un quejigo; aprovechada como refugio por un dermáptero (vulgo tijereta o cortapicha). Nos dimos cuenta cuando vimos la foto en pantalla.
Clanoptilus sp.
Y el bichejo más espectacular del día -y me atrevería a decir de la temporada, para el que esto escribe- fue este raro neuróptero: Puer maculatus.
Puer maculatus es un insecto que se creía extinguido, ya que no se volvió a ver durante casi 200 años después de su descripción, en 1789 (en el sur de Francia). Actualmente solo hay citas de tres países mediterráneos: Francia, España e Israel (esta cita muy antigua). En los últimos años, con la "globalización" de la fotografía digital, están sumandose numerosas nuevas citas. Incluidas las de los que no lo habíamos visto nunca, como ha sido mi caso. Como es un bichejo tranquilote, y que vuela poco, pude hacerle bastantes fotos que envié a mi amigo Iñigo Sánchez que, rápidamente, me dijo de qué se trataba. Por lo que hemos consultado sería la primera cita para la provincia de Málaga.
Mientras hacía el reportaje al bichejo mi amigo Faustino disfrutaba del aire fresco bajo los quejigos de montaña.
Nuevos quejigos junto a troncos caídos por la edad.
Hacia el sur el gran cerro que forma la cumbre de la Torrecilla (1.918 m. según el IGN, un metro menos de lo que siempre creímos). Para Faustino y para mi, junto a otros viejos amigos del CMSP, fue nuestra primera gran aventura de montaña fuera de nuestra Sierra de Grazalema. Nos costó varios intentos, ya que veníamos en invierno (con hielo y nieve) y hasta que no trajimos el material adecuado no pudimos hacer cumbre. Era una ascención más dura que la actual, ya que había que subir andando desde la carretera Ronda-San Pedro de Alcántara.
Al suroeste el Cerro de la Plazoleta (a la izq.), Sierra Palmitera (en el centro) y al fondo a la der. Sierra Bermeja. Detrás de todo, el azul del Mediterráneo.
Tirando un poco de zoom el Peñón de Gibraltar, el Estrecho y el Rif africano.
Eumigus sp. Un saltamontes grandote y con alas diminutas que solo puede saltar torpemente.
Astragalus nevadensis subsp. nevadensis. Endemismo de sierras béticas. Es una planta espinosa -como defensa ante los herbívoros- de bellas flores rosadas. Su nombre proviene de que su "descubridor", el botánico suizo Boissier, la localizó tanto en Sierra Nevada como en esta sierra: “Habitat in Hispaniae australis Sierra Nevada et Sierra de la Nieve” (1843).
La Plazoleta, ahora más cerca, y 1.700 m. más abajo la Costa del Sol (San Pedro de Alcántara).
La Sierra de Grazalema desde el Puerto de los Pilones.
Arce (Acer monspessulanum).
Nos disponemos a perder altura bajando por la Cañada del Cuerno (en algunos textos C. del Cuervo).
Acinos alpinus. Otra flor de montaña. Habita incluso por encima de los 3.000 m. en Sierra Nevada y Pirineos.
Pinsapo (Abies pinsapo).
Segunda ocasión que veo esta planta: Cynoglossum pustulatum. La anterior fue también entre pinsapos en Grazalema.
Una planta de la familia Rubiaceae que no hemos conseguido identificar.
Las últimas orquídeas en florecer todavía no han terminado su ciclo. Son estas Epipactis sp., también entre pinsapos.
Pinsapos de la Cañada del Cuerno.
Crepis albida.
Campanula mollis (campanilla de roca).
Catananche caerulea.
Ya en los pinares cercanos al área de Quejigales nos topamos con esta "escoba de bruja". Se trata de una malformación en la rama de un pino, la cual se desarrolla muchísimo más que las demás quedando muy tupida de agujas. Está producida por un organismo (exactamente un plásmido) denominado Candidatus phytoplasma pini.
Este penetra en las células del árbol incitando a que se reproduzcan
con mayor velocidad y menor tamaño, de ahí estas formaciones con forma
de bola. El proceso es similar al de un tumor, fomentado la alteración y
sobredesarrollo de las células. Su forma de llegar al pino es a través de otro organismo que le sirve de transporte (vector) como puede ser un insecto o un ave, que al picar en la rama lo introduce.
Hemos encontrado en nuestro archivo esta misma "escoba de bruja" fotografiada en 2011.
Endrinos (Prunus spinosa) con los frutos todavía sin madurar.
Para ir acabando unas flores y bichos fotografiados en el entorno de Quejigales. Flor de rosal canino. El centro del estigma nos pareció una garrapata!!
Acmaeodera bipunctata, o nigellata (son casi idénticos de visu). Info facilitada por nuestro amigo A. Verdugo.
Anthaxia croesus (= scutellaris). Info de A. Verdugo.
Agalla de Diplolepis mayri (pequeña avispa de la familia Cynipidae) en Rosal canino.
Ononis spinosa subsp. australis.
Calocoris nemoralis con colores negro y gris que no había visto antes (normalmente son rojinegras). Info de M. Baena.
Trichodes flavocinctus. Coleóptero que pillamos lleno de polen, del que se alimenta.
Mosca del género Gymnosoma. Además de tener colores bonitos son exquisitas, se alimentan de polen y nectar de plantas.
Thymelicus sylvestris sobre una flor de Anchusa azurea. He leído que gustan de posarse y libar en flores de color violeta.
Allium paniculatum.
Lomelosia simplex subsp. dentata.
Ptilostemon hispanicus. Un bonito cardo de flores rosadas y hojas con espinas amarillas.
Rhamnus myrtifolia con sus frutos rojos. Un arbusto que suele vivir adosado a la caliza.
Rhaponticum coniferum, de nombre común cuchara de pastor o piñita de monte (entre otros).
Concluyendo: un bonito paseo por la montaña, y en buena compañía, por un lugar que conocemos de hace muchos años pero que siempre nos depara alguna sorpresa o alguna visión diferente.
Maravilloso poder leer y ver tus trabajos como siempre. Un abrazo.
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